EL PUEBLO
Enclavado en la ladera de la Sierra de Valdelacasa, Berrueco tiene una situación privilegiada y desde él se puede contemplar la más amplia panorámica de la Laguna de Gallocanta.
La aparición del núcleo urbano de Berrueco, iría ligada a la propia constucción del castillo, fundado en plena Edad MEdia, como punto estratégico de defensa, en torno al castillo.
Aquí encontramos el patrón de urbanismo general que seguían la mayoría de aldeas medievales. El grupo de construcciónes más importantes marcarían el centro del núcleo urbano: iglesia medieval de Santa Ana (S. XIII), casa del Infanzón, casa del verdugo, casa del cura ... y en torno a éste encontraríamos una segunda fase que comprenderían edificios comunales cómo el horno, la fragua ... En tercer lugar, estarían las casas de los aldeanos, que cuanto más humildes más alejadas del centro estarían.
Con el paso de los años las construcciones se irían alejando de estenúcleo, siguiendo la pendiente, hasta conformarse lo qeu se conocería como "Barrio bajo" en el que se encuentran las construcciónes más recientes, a diferencia del "barrio alto".
QUE VER Y QUE HACER
PATRIMONIO
Iglesia Parroquial
Su fachada combina piedra roja y blanca, es un templo barroco, construido en el siglo XVIII, cuya torre presenta detalles mudéjares. La bicromía de la piedra, obtenida de la propia ladera, también se observa en los muros de las viviendas.
Poblado Celtíbero "El Castellar"
Pequeño poblado fortificado celtíbero asaentado sobre una loma, que estuvo ocupado entre los siglos II y I a.C.
El recinto amurallado, está formado por dos lienzos paralelos de enormes sillares de piedra, que lo confirman como uno de los conjuntos defensivos más espectaculares de la Celtiberia.
Orientada hacia la laguna, en el centro de la muralla oeste, encontramos la puerta, protegida por un complejo sistema de paso en zigzag y, nada más entrar al poblado una pequeña área con aceras y desagüe, que otorga un aspecto relativamente urbano a este punto de acceso.
Tras una excavación arqueológica realizada a finales del S. XX, sabemos que el poblado se configura en torno a una calle central que recorre el espacio de norte a sur, dotada de una gran anchura, lo que facilita el acceso a las estrechas fachadas de las viviendas. Se pueden calcular entre 20-28 el total de las habitaciónes /hogares del asentamiento.
Los muros de las viviendas estaban construidas a vase de adobes y tapial, asentados sobre pequeños zócalos de piedra. La techumbre era muy sencilla, nomalmente ramas recubiertas de barro, apoyadas sobre los muros y postes centrales verticales. La mayor parte de los suelos eran de tierra apisonada, aunque en algunas casas podemos encontrar lajas de piedra.